Esta joyita de video, ilustra un punto interesante sobre los relatos de abducciones que recorren el mundo:
http://www.youtube.com/watch?v=RUki-07sp2E
Al principio, la narración, acompañada de la evidencia en video de la escalofriante sesión de hipnosis, hace mella en el escéptico que llevo dentro y desea sacar a relucir al fan de la ci-fi.
El principio del relato es sólido, tenebroso, verosímil. Hace pensar en las pruebas que hacemos como humanos sobre varios animales, y me hace preguntarme si no sería sencillo que una raza ajena a este mundo hiciera pruebas similares al no encontrarnos sino como un curioso mamífero nativo. Además, se han dado casos de experimentación sobre humanos, que hacen parecer a las cosas relatadas durante las abducciones como paseos en la playa.
Pero después, el relato del video se torna... absurdo, por no usar otras palabras.
Si esos seres que te han perseguido sin cuartel ni misericordia, viviseccionándote por años, sólo te desean como banco de esperma... ¿Para qué carajos necesitan presentarte a tus hijos? ¿Y qué hay de ese momento aberrante donde los híbridos le tocan la mano al tipo y lo miran?
SImplemente, el velo del misterio se rompe. El comportamiento de los "seres" descritos, no es verosímil porque la persona a cargo del relato, no tiene la madurez sentimental para entenderlo. Hablamos de gente "simple" para la cual, no hay en realidad un dilema, porque estos relatos son proyecciones de sus deseos y personalidades.
Poniéndolo en otras palabras, este tipo estaría dispuesto a torturar y hacer daño a otra persona para un "bien mayor" y en su mente, un último acto de bondad (por estúpido que parezca) es suficiente para redimir estas acciones.
Esto es más común de lo que parece. Los relatos de abducciones, siempre parten de dos elementos: El guión de abducción básico, y la personalización, el "tunning" emocional.
El guión de abducción básico sigue un patrón pre-establecido por el cine y la propia cultura ovni: Irrupción en un cuarto durante la noche (opcional, intercambiable con secuestros en el campo); Introducción a la nave; Pruebas físicas; Implante de rastreadores (opcional); Continuación de los secuestros (opcional).
Para mayor información sobre este tema, un artículo interesante:
http://blogs.elcorreo.com/magonia/2006/1/8/abducidos
El "tunning" viene fuertemente acompañado de una proyección de los miedos, esperanzas y deseos de las personas que "sufren" estas abducciones:
Las personas de menor cultura, o que sufren de algún caso de "sentimiento de inferioridad" presentan a sus "abductores" como entidades más o menos benignas, que les necesitan desesperadamente por algún motivo. Aquellos que sienten un complejo mesiánico y aseguran que se les ha confiado un importante mensaje, claro siempre de carácter moral y del tipo "encabronadamente vago y ambiguo" como "sean buenos unos con otros", "las guerras son malas" o mi favorito "no dañen el planeta". Obviamente los extraterrestre podrían darnos la receta de algún combustible no contaminante que nos sacara de apuros y nos ayudara a resolver los problemas que sus moralinas majestades plantean, pero en lugar de eso, prefieren sólo reprendernos por nuestro mal actuar. Eso habla un poco de la calidad que estas personas ofrecen en el ejercicio de su paternidad.
Otro tipo de persona en la categoría mencionada, presenta a sus secuestradores como seres sin ética y sin misericordia, pero con arranques severos de ternura esporádica y repentina, o con fuertes connotaciones sexuales. No es raro encontrar relatos sobre hombres y mujeres que son abducidos y "obligados" a tener relaciones sexuales con "entes" que asemejan parcialmente a seres humanos o al menos poseen características antropomórficas. Esto acompañado, comúnmente de sesiones de "tortura" o auscultación "médica". Vamos, como si hubieran caído en una película de "SAW" o "El Hostal".
Las incongruencias referidas a los procedimientos "médicos" usados por los invasores de cuartos, van desde el uso de elementos populares de la ci-fi, como las agujas en el ombligo, en los ojos, rayos paralizadores; hasta el detalle de que los procedimientos descritos, nunca superan el nivel de conocimiento técnico de los involucrados. Nunca se ve aplicaciones de tomografías, radiografías, resonancias, ni nada de ese carácter, sólo pinchazos y cortes.
Cada persona describe con ligeras diferencias a sus agresores y con total inconsistencia sus planes, origen, procedimientos, vehículos y hospitalidad, que más que dudar de la veracidad de estos relatos, se duda de la plena cordura de sus narradores.
http://www.youtube.com/watch?v=RUki-07sp2E
Al principio, la narración, acompañada de la evidencia en video de la escalofriante sesión de hipnosis, hace mella en el escéptico que llevo dentro y desea sacar a relucir al fan de la ci-fi.
El principio del relato es sólido, tenebroso, verosímil. Hace pensar en las pruebas que hacemos como humanos sobre varios animales, y me hace preguntarme si no sería sencillo que una raza ajena a este mundo hiciera pruebas similares al no encontrarnos sino como un curioso mamífero nativo. Además, se han dado casos de experimentación sobre humanos, que hacen parecer a las cosas relatadas durante las abducciones como paseos en la playa.
Pero después, el relato del video se torna... absurdo, por no usar otras palabras.
Si esos seres que te han perseguido sin cuartel ni misericordia, viviseccionándote por años, sólo te desean como banco de esperma... ¿Para qué carajos necesitan presentarte a tus hijos? ¿Y qué hay de ese momento aberrante donde los híbridos le tocan la mano al tipo y lo miran?
SImplemente, el velo del misterio se rompe. El comportamiento de los "seres" descritos, no es verosímil porque la persona a cargo del relato, no tiene la madurez sentimental para entenderlo. Hablamos de gente "simple" para la cual, no hay en realidad un dilema, porque estos relatos son proyecciones de sus deseos y personalidades.
Poniéndolo en otras palabras, este tipo estaría dispuesto a torturar y hacer daño a otra persona para un "bien mayor" y en su mente, un último acto de bondad (por estúpido que parezca) es suficiente para redimir estas acciones.
Esto es más común de lo que parece. Los relatos de abducciones, siempre parten de dos elementos: El guión de abducción básico, y la personalización, el "tunning" emocional.
El guión de abducción básico sigue un patrón pre-establecido por el cine y la propia cultura ovni: Irrupción en un cuarto durante la noche (opcional, intercambiable con secuestros en el campo); Introducción a la nave; Pruebas físicas; Implante de rastreadores (opcional); Continuación de los secuestros (opcional).
Para mayor información sobre este tema, un artículo interesante:
http://blogs.elcorreo.com/magonia/2006/1/8/abducidos
El "tunning" viene fuertemente acompañado de una proyección de los miedos, esperanzas y deseos de las personas que "sufren" estas abducciones:
Las personas de menor cultura, o que sufren de algún caso de "sentimiento de inferioridad" presentan a sus "abductores" como entidades más o menos benignas, que les necesitan desesperadamente por algún motivo. Aquellos que sienten un complejo mesiánico y aseguran que se les ha confiado un importante mensaje, claro siempre de carácter moral y del tipo "encabronadamente vago y ambiguo" como "sean buenos unos con otros", "las guerras son malas" o mi favorito "no dañen el planeta". Obviamente los extraterrestre podrían darnos la receta de algún combustible no contaminante que nos sacara de apuros y nos ayudara a resolver los problemas que sus moralinas majestades plantean, pero en lugar de eso, prefieren sólo reprendernos por nuestro mal actuar. Eso habla un poco de la calidad que estas personas ofrecen en el ejercicio de su paternidad.
Otro tipo de persona en la categoría mencionada, presenta a sus secuestradores como seres sin ética y sin misericordia, pero con arranques severos de ternura esporádica y repentina, o con fuertes connotaciones sexuales. No es raro encontrar relatos sobre hombres y mujeres que son abducidos y "obligados" a tener relaciones sexuales con "entes" que asemejan parcialmente a seres humanos o al menos poseen características antropomórficas. Esto acompañado, comúnmente de sesiones de "tortura" o auscultación "médica". Vamos, como si hubieran caído en una película de "SAW" o "El Hostal".
Las incongruencias referidas a los procedimientos "médicos" usados por los invasores de cuartos, van desde el uso de elementos populares de la ci-fi, como las agujas en el ombligo, en los ojos, rayos paralizadores; hasta el detalle de que los procedimientos descritos, nunca superan el nivel de conocimiento técnico de los involucrados. Nunca se ve aplicaciones de tomografías, radiografías, resonancias, ni nada de ese carácter, sólo pinchazos y cortes.
Cada persona describe con ligeras diferencias a sus agresores y con total inconsistencia sus planes, origen, procedimientos, vehículos y hospitalidad, que más que dudar de la veracidad de estos relatos, se duda de la plena cordura de sus narradores.
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